Con el juego, el niño/a interactúa y
toma conciencia de sí mismo, hecho que favorecerá el paso a la representación
y a la abstracción que son las
bases para cualquier aprendizaje
Mediante el cuerpo, el movimiento y la relación, se favorece su expresividad psicomotriz,
abriendo el niño/a a la comunicación y la formación del pensamiento operatorio.
"La Psicomotricidad está basada en una visión global de la persona, integra las interacciones cognitivas, emocionales, simbólicas y físicas en la capacidad de la persona de ser y de expresarse en un contexto psicosocial, y tiene un papel fundamental en el desarrollo armónico de la personalidad. Partiendo de esta concepción se desarrollan distintas formas de intervención psicomotriz que tienen aplicación, a cualquier edad de la vida, en los ámbitos preventivo, educativo, reeducativo y terapéutico. "
Foro Europeo de Psicomotricidad (Brujas, 1996)
Se pretende acompañar al niño/a durante su desarrollo, para favorecer la afirmación de su personalidad, una mejor adaptación a su entorno y a las relaciones en sí mismo y con los otros.
Des de esta disciplina se puede intervenir en déficits psicomotrices de carácter evolutivo (esquema corporal, lateralidad, estructuración espacio-tiempo) y/o motriz (hipertonía, hipotonía, lesiones del sistema nerviosos…), así como en otros trastornos que impliquen dificultades de comunicación, de regulación de la conducta y de las emociones.
La terapia psicomotriz se hace a nivel de sesiones individuales y, en su caso, grupales.